Blogia
EGUBL㋡G

SEGUNDO MES

SEGUNDO MES - Hot and cold

Durante un momento, imaginad la típica urbanización americana: amplias calles asfaltadas, jardines de césped sin vallar, casas de madera luciendo su bandera... Yo estoy viviendo en un adosado de dos pisos de altura. Mi habitación está situada en la planta superior y tiene tres ventanales con orientación al Este. Cuando me despierto cada día, sobre las 6 AM, aún no ha salido el sol. Tengo que esperar al fin de semana para apagar el despertador y dejar que los cálidos amaneceres me despierten.

 

Cuando abrí los ojos el sábado 10 de octubre, lo vi todo blanco. Tuve que frotarme los ojos para darme cuenta de que lo que estaba viendo era nieve. Había en todas partes: en los tejados, en los árboles, en los coches... En pocas horas, el calor la derritió toda. Fue un día para recordar, ya que empezó con nieve y terminó con fuego. Y es que por la noche fui a un espectáculo llamado Iron Pour, donde fundían el hierro y lo derramaban sobre unos moldes, consiguiendo así unas figuras muy peculiares.

 

 

Sé que en España también han bajado las temperaturas, pero no os podéis hacer una idea del frío que hace aquí. Lo bueno es que, gracias a la calefacción, en los lugares cerrados se está a gusto. Sin embargo, al igual que pasa en verano con los aires acondicionados, la gente suele acabar resfriada. Y claro, ahora con la gripe A (por cierto, aquí la llaman N1H1 Flu) todo el mundo se asusta cuando alguien estornuda. Hablando de virus, los que lo habéis visto hace poco, sabréis que está pasando por un mal momento. Este mes ha sido su cumpleaños y ha estado a punto de morir. Si no hubiera sido por Noah Johnson, el informático del instituto, ahora os estaría escribiendo sin eñes ni tildes.

 

EL IDIOMA

Muchos de vosotros me preguntáis cómo llevo el inglés. La verdad es que me está costando un poquito entender a la gente. El acento que estoy escuchando aquí es muy distinto de aquel que escuché el verano pasado en Londres. En septiembre, estuve asistiendo a un curso en la universidad de Hamline, pero tuve que dejarlo porque el nivel era muy alto. Ahora, estoy recibiendo clases de gramática en un centro cultural muy cerca de mi casa. 

 

EL TRABAJO

Ahí va la anécdota de octubre: un día estaba en el pasillo del instituto y de repente escucho la canción If you wanna be my lover, de las Spice Girls. Me doy media vuelta y veo un grupo de quinceañeras cantando y bailando. No pude evitar reír. Era como ver High School Musical en directo. Pues bien, no satisfechas con ello, se animaron con Baby, one more time, de Britney Spears. Lo peor de todo es que tengo que reconocer que cantaban bien. ¿Cómo no lo iban hacer? ¡Es su lengua materna! Supongo que las comparé con mis amigas de España, cuando cantaban ese tipo de canciones hace una década.

 

 

Hablando de amigas, ¿no os he hablado de Claudia? Ella trabaja en mi instituto para ELL, un departamento perteneciente al área de Educación del Ayuntamiento de Saint Paul, y que se encarga de la integración de aquellos estudiantes que tienen el inglés como segundo idioma. Esta mexicana-vasca afincada en Minnesota me ha conseguido un nuevo curro en LCD, un programa que depende de ELL. Una vez al mes, los trabajadores sociales se reúnen con los padres de los niños latinos. Mi trabajo consiste en tener ocupados a los chavales mientras dura el encuentro. El primer día, sólo éramos tres profesores para atender a más de setenta niños de entre 2 a 12 años. Todavía no sé cómo sobrevivimos.

 

EL TRANSPORTE

Cada día utilizo tres medios de transporte: Por la mañana (7:00 PM), mi madre de acogida nos lleva en coche al instituto; por la tarde (4:00 PM), voy en autobús a casa; y por la noche (de 6:30 a 8:30 PM), voy en bici a las clases de inglés. Un día estaba observando a los pasajeros del autobús. Había negros, blancos, amarillos… me acordé de Rosa Parks, la primera mujer negra que no cedió el asiento a un blanco. Aquel pequeño hecho fue el inicio del movimiento por los derechos civiles en Estados Unidos. Seguro que Barack Obama piensa muchas veces en ella.

 

LOS AMITIES

Por cierto, ¿sabíais qué Obama estuvo en Saint Paul el mes pasado? Vino para dar un meeting sobre sanidad pública, un tema actual muy polémico para los americanos. En la vigilia del evento, cientos de personas acamparon en la entrada del edificio para hacer cola, ya que cualquiera podía asistir. Yo no pude ir porque Amity Institute nos había convocado a todos los amities de Minnesota para darnos la bienvenida y un montón de papeles más. El resto son de Latinoamérica, Alemania y Francia. Lo bueno de esta reunión fue que conocimos a muchas personas con las que poder quedar y pasar el tiempo libre. Mi jefa Rhonda me acompañó con su fantástico coche, y en la autopista nos adelantaron una docena de automóviles oficiales que se dirigían al aeropuerto para recoger al presidente.

 

LA PELICULA

Desde que estoy en Minnesota he ido dos veces al cine. En septiembre, fui con Rhonda y unos amigos a ver La proposición. Nos reímos mucho con esta comedia romántica. Además, entendí los diálogos mejor de lo que me esperaba. Y este mes, Tim (a quien le doy clases particulares de español) me invitó a ver Zombilandia, una película muy apropiada para ver en Halloween. Sin embargo, es tan mala que no creo que llegué a Europa, pero quién sabe… nos llega cada cosa de Hollywood.  

 

 

EL VIAJECITO   

Seguimos con el séptimo arte… Si el mes pasado fui a Fargo porque allí se rodó la película de cuyo “pueblo” no quiero acordarme, en octubre he ido con algunos amities a Chicago, una ciudad preciosa donde se han rodado películas como: Batman, Spiderman, Los Intocables… ¿os acordáis de ésta última? Aquí tenéis una de las escenas más importantes del film; y aquí, una parodia muy graciosa de la misma.

 

EL ARTE

Además, en el Art Museum de Chicago pudimos ver obras de Picasso, Dalí, El Greco, Monet, Van Gogh, etc. Afuera del museo observamos diversas esculturas, pero la que atrae al mayor número de personas es The bean (una enorme judía de metal que refleja, con extrañas formas, todo lo que tiene a su alrededor). En el mismo parque, un edificio  me recuerda al museo Gugenheim de Bilbao. Se trata del Jay Pritzer Pavilion, otra obra del famoso arquitecto canadiense Frank Gehry. 

 

 

 

  

No quiero terminar sin antes explicaros qué es Saint Paul Art Crawl. Una vez al año, los artistas de la ciudad abren las puertas de sus estudios para darse a conocer. Mi padre de acogida y yo visitamos cuatro edificios, con decenas de exposiciones en cada piso. La verdad es que valió la pena acabar casi crawling de una exhibición a otra.

 

Por último, os pido un favor: cruzad los dedos para que mi portátil siga funcionando y podáis leerme el mes que viene.

 

¡Hasta pronto!